Juveniles | Lección 6: Las promesas no mueren | 3er Trimestre 2023 | Año A
Lección 6:
Las promesas no mueren
La nación pudo perecer con la muerte de Moisés; pero las promesas de Dios se cumplieron.
Relato bíblico y Comentario:
Josué 1-5:12Texto Clave:
Patriarcas y Profetas (Los Escogidos), capítulo 44.
«Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas.» (Josué 1:7).
Más que Luz
«Aunque llenos de pesar por su gran pérdida, los israelitas sabían que no quedaban solos. De día, la columna de nube descansaba sobre el tabernáculo, y de noche la columna de fuego, como garantía de que Dios seguiría guiándoles y ayudándoles si querían andar en el camino de sus mandamientos.» (Patriarcas y profetas, p. 514).¿Qué opinas?
A continuación viene una lista de personas que regularmente te prometen cosas. Al lado de sus nombres, indica si alguna vez han: roto una promesa (RP), cumplido su promesa (CP), u olvidado su promesa (OP).
_____ Padre
_____ Madre
_____ Hermana
_____ Hermano
_____ Abuelos
_____ Maestro/Maestra
_____ Pastor
_____ Amigo/Amiga
_____ Novio/Novia
_____ Gobierno
_____ Anunciantes
Dedica un momento para recordar las circunstancias en las que cada uno de ellos rompió, cumplió u olvidó las promesas que te hizo. Escríbelas en una hoja de papel en el orden en que aparecen arriba. Luego hazte la siguiente pregunta: ¿Quién es el que más prometió? ¿Quién cumplió su promesa?
¿Lo sabías?
abías que los rubenitas, los gaditas y la media tribu de Manasés no cruzaron a la tierra prometida? Sin embargo, animaron a Josué a ser un hombre de Dios y le dijeron que el resto de los israelitas lo seguirían.
¿Sabías que hubo otro cruce milagroso por el agua aparte del que sucedió a la salida de Egipto? Aunque tal vez palidezca en comparación con el cruce del Mar Rojo, el cruce del Jordán no pareciera ser menos espectacular al entrar los israelitas a la tierra prometida. Lee Josué 3 para ver lo que sucedió.
Identifícate con la Historia
«Aconteció después de la muerte de Moisés siervo de Jehová, que Jehová habló a Josué hijo de Nun, servidor de Moisés, diciendo: “Mi siervo Moisés ha muerto; ahora, pues, levántate y pasa este Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que yo les doy a los hijos de Israel. Yo os he entregado, como lo había dicho a Moisés, todo lugar que pisare la planta de vuestro pie. Desde el desierto y el Líbano hasta el gran río Éufrates, toda la tierra de los heteos hasta el gran mar donde se pone el sol, será vuestro territorio. Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te de sampararé.
“Esfuérzate y sé valiente; porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que la daría a ellos. Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a dies tra ni a siniestra, para que seas pros perado en todas las cosas que emprendas. Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas”.
Y Josué mandó a los oficiales del pueblo, diciendo: “Pasad por en me dio del campamento y mandad al pue blo, diciendo: ‘Preparaos comida, por que dentro de tres días pasaréis el Jordán pa ra entrar a poseer la tierra que Jehová vuestro Dios os da en pose sión”’.
«También habló Josué a los rubenitas y gaditas y a la media tribu de Manasés, diciendo: “Acordaos de la palabra que Moisés, siervo de Jehová, os mandó diciendo: ‘Jehová vuestro Dios os ha dado reposo, y os ha dado esta tierra. Vuestras mujeres, vuestros niños y vuestros ganados quedarán en la tierra que Moisés os ha dado a este lado del Jordán; mas vosotros, todos los valientes y fuertes, pasaréis ar mados del ante de vuestros her manos, y les ayu daréis, hasta tanto que Jehová haya dado reposo a vuestros herma nos como a vosotros, y que ellos tam bién posean la tierra que Jehová vuestro Dios les da’; y después vol veréis vosotros a la tierra de vuestra herencia, la cual Moisés siervo de Jehová os ha dado, a este lado del Jordán hacia donde nace el sol; y entraréis en posesión de ella”.
Entonces respondieron a Josué, diciendo: “Nosotros hare mos to das las cosas que nos has mandado, e iremos adondequiera que nos mandes.
De la ma nera que obedecimos a Moisés en todas las cosas, así te obedeceremos a ti; solamente que Jehová tu Dios esté contigo, como estuvo con Moisés. Cualquiera que fuere rebelde a tu man da miento, y no obedeciere a tus palabras en todas las cosas que le mandes, que muera; solamente que te esfuerces y seas valiente”».
(Josué 1)
Explica la Historia
¿Qué elemento sobresale en este pasaje acerca de las promesas?
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¿Por qué accedió Dios a cumplir a Josué las mismas promesas que le había hecho a Moisés?
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¿Por qué crees que las dos tribus y media permanecieron al otro lado del Jordán?
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¿Por qué crees que es importante señalar que Dios cumple sus promesas?
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En la historia de Rahab, registrada en Josué 2 (que también es parte de la porción de las Escrituras para esta semana), ¿qué opinaba la gente que vivía en la tierra prometida acerca de la llegada de los israelitas a su tierra?
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Encierra en un círculo una promesa en este pasaje que puedes adaptar a tu vida inmediatamente.
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Subraya cualquier parte que sea confusa para ti en este momento. Pídele a Dios en oración que te revele su carácter de amor a la vez que te ayuda a comprender mejor ese pasaje.
Puntos de Impacto
«No faltó palabra de todas las buenas promesas que Jehová había hecho a la casa de Israel; todo se cumplió» (Josué 21:45).
«Pues os digo, que Cristo Jesús vino a ser siervo de la circuncisión para mostrar la verdad de Dios, para confirmar las promesas he chas a los padres» (Romanos 15:8).
«Bendito sea Jehová, que ha dado paz a su pueblo Israel, conforme a todo lo que él había dicho; ninguna palabra de todas sus promesas que expresó por Moisés su siervo, ha faltado» (1 Reyes 8:56).
«Entonces creyeron a sus palabras y cantaron su alabanza» (Salmo 106:12).
Puntos de Vista
«No es el juramento lo que nos hace creer en el hombre, sino el hombre en el jura mento».—Esquilo, dramaturgo griego del siglo V a.C.
«Es verdaderamente pobre aquel que no puede prometer nada».—Thomas Fuller, his toriador inglés del siglo XVII.
«Dios nunca hizo una promesa que fuera demasiado buena para ser verdad».—Dwight L. Moody, evangelista estadounidense del siglo XIX.
Aplícala a tu vida
Sábado
Contesta el ejercicio de la sección ¿Qué opinas? si todavía no lo has hecho. Observa tus respuestas. ¿Identificaste a alguien que continuamente te hace promesas y luego no las cumple? Tal vez notaste que había más promesas sin cumplir que promesas cumplidas. Esto pareciera ser la naturaleza humana. Constantemente vemos promesas que no se cumplen y nosotros mismos dejamos muchas sin cumplir.
En ocasiones las circunstancias nos impiden cumplir lo que dijimos que haríamos. Sin embargo, lee Josué 1:3-5 y observa cómo Dios estaba dispuesto a cumplir su palabra al pueblo de Israel y aun más específicamente, cumplir las promesas hechas a Moisés en la persona de Josué.
Domingo
Lee la historia de Rahab (Josué 2). Estúdiala en el contexto de las promesas hechas por los israelitas, por Rahab y por Dios. Nota que cada parte cumplió y le cumplieron las promesas hechas. Al final, Dios fue glorificado por cada promesa.
Ahora, lee acerca del cruce del Río Jordán (Josué 3). Cuando el arca del pacto (que literalmente significa «promesa») es llevado al agua, el Jordán, que estaba en niveles de inundación, se detiene para permitir que los israelitas pasen ilesos a la tierra prometida. Qué recordativo maravilloso del momento cuando se abrió el Mar Rojo, que ninguno de estos israelitas (con excepción de Josué y Caleb) había experimentado.
Lunes
Cuando leas la sección Identifícate con la historia verás que Dios constantemente le dice a su pueblo que él honraría las promesas hechas a Moisés. Josué lo entiende y a cambio, cumple las promesas que Moisés les hizo a los rubenitas, a los gaditas y a la media tribu de Manasés.
Además, tenemos la tendencia de cumplir promesas a medida que más promesas sean cumplidas a nosotros. Es un asunto de carácter cumplir lo que hemos prometido hacer. Es mejor prometer menos para cumplir lo que sí prometemos.
¿De qué manera glorifica a Dios el cumplimiento de las promesas que hacemos?
Martes
Lee la sección Más luz. ¿Crees que sería un consuelo o que te asustaría tener evidencia tangible de que Dios está constantemente contigo?
La columna de nube y la columna de fuego eran un testimonio a las promesas que Dios le había hecho al pueblo y que siempre estaría con ellos.
Nota que al final del párrafo de la Linterna dice que Dios estaría con ellos si guardaban sus mandamientos. Aunque se les dificulta guardar lo que les pidió, vemos la gracia de Dios a través del Antiguo Testamento mientras él trata de permanecer en un pacto de amor con su pueblo.
Miércoles
Lee los Puntos de impacto. ¿A cuál de estos versículos te sientes atraído? ¿Notas algún significado en el orden en que fueron acomodados? ¿Qué podemos decir acerca de las promesas de Dios a través de la historia de la salvación?
Escribe en una ficha el versículo que hace mayor impacto en tu corazón. Guarda esa ficha bajo tu almohada para leerla antes de acostarte y cuando te levantes todas las mañanas. Que te sirva de un recordativo de la constancia de Dios y de sus promesas.
Jueves
Piensa en el momento en que prometiste algo que no pudiste cumplir. Hazte las siguientes preguntas:
1. ¿Tuve la intención de no cumplir la promesa?
2. ¿Al hacer la promesa, realmente pensé que podría cumplir con ella?
3. ¿Sucede a menudo que no puedo cumplir con mi promesa?
4. ¿Cuán en serio considero las promesas que hago?
Enumera las últimas cinco cosas que has prometido a la gente. Ponle fecha para que veas si te estás tardando mucho para cumplir tus promesas o no. Luego observa cuán rápidamente puedes cumplir cada promesa. ¿Lo podrías hacer todo hoy mismo? ¿No sería bonito poder cumplirlas todas? Pídele a Dios que te capacite y te motive por su gracia.
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Viernes
¿Son importantes para ti las promesas? Obviamente lo son para Dios. Son tan importantes que está dispuesto a transferir sus promesas de un grupo de personas a otro, y a diferentes naciones. ¡Esas sí que son promesas!
¿Habrás hecho una promesa que es muy importante en tu vida? ¿Alguna promesa que realmente has decidido cumplir?
Piensa en esas promesas y lo que tienes que hacer para cumplirlas, y esfuérzate en hacerlo.
A la misma vez, dedica tiempo a la oración para que logres ser un cristiano de palabra y honra a Dios con las promesas que le hagas a él y a los demás.
Plan de lectura para esta semana*
Patriarcas y profetas (Los Escogidos), capítulo 44.
*Siguiendo este plan podrás leer al menos un libro cada año de la serie El conflicto de los siglos.
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