Dios es nuestro Creador, Redentor y Sustentador. Es el propietario y el proveedor de todo en nuestra vida; por eso lo que somos y lo que tenemos viene de él y le pertenece a él.
Cuando comprendemos ese principio enten-demos también la necesidad de sumisión al Señor. Comprendemos que él es el dueño del oro y de la plata (Hageo 2:8), pero nos convo-có para administrar lo que pone en nuestras manos, encomendándonos la tarea de cuidar con dedicación y sabiduría la naturaleza creada, el cuerpo, el tiempo, los talentos y los te-soros que nos fueron confiados.
De la misma forma, entender ese precepto nos conduce a la fidelidad, que es la característica de quien demuestra celo, respeto, lealtad y constancia con los compromisos asumidos. Está relacionada a la respuesta de quien nos ama tiernamente y siempre ofrece el mejor camino para la felicidad, aquí y en el futuro eterno.
Por medio de este proyecto tenemos una oportunidad más de vivir esa fidelidad: emplear sabiamente el tiempo, conservar el cuerpo de manera saludable, usar activamente los dones, y dedicar a Dios los recursos con amor y gratitud.
Aproveche esta oportunidad, prepare el corazón, cree una atmósfera agradable de reconocimiento, adoración y fidelidad al Salvador. Haga de su vida diaria una ocasión agradable para estar con él, y con seguridad la bendición celestial acompañará sus pasos en este camino. .
Leer el Material en PDF
Fuente: Adventistas.org
Dios los bendiga!!!
Post A Comment:
0 comments:
Escribe tu comentario.