Cuna | Lección 1: Samuel escucha a Dios | 3er Trimestre 2024

Lección 1 de Cuna (Julio)
SAMUEL ESCUCHA ADIOS

Cuna | Lección 1: Samuel escucha a Dios | 3er Trimestre | Año A

Textos clave y referencias:
1 SAMUEL 3:1-10;
PATRIARCAS Y PROFETAS, PP. 629, 630.

Versículo para Memorizar:
“El joven Samuel ministraba al Señor” (1 Samuel 3:1, NRV).

Mensaje:
Somos pequeños ayudantes de Dios.

Padres:
Al finalizar el mes sus hijos podrán:
Saber que pueden ser ayudadores.
Sentir alegría al ayudar a Dios.
Responder ayudando en el hogar y en la Escuela Sabática.

Carlos es un niño que ayuda a poner la mesa.
Samuel también ayudaba, así como Carlos.

El pequeño Samuel vive en el tabernáculo de Dios. Samuel tiene tareas para hacer. Es ayudante del sacerdote Elí. [Simule una tienda de campaña con una sábana sobre la mesa. Mientras la arma, canten: “El niño Samuel”, con la música de “Seré un ayudante” (Alabanzas infantiles, no 115), con la siguiente letra: El niño Samuel / fue un buen ayudante. / En el templo trabajó / fue un ayudante].

¿Ves a Samuel?[Señale a Samuel]. ¿Ves su escoba? [Señale la escoba.] El pequeño Samuel tiene una tarea que hacer: Barrer el templo de Dios.[Señale el templo.] El pequeño Samuel es el ayudante de Elí. [Señale a Elí.] El pequeño Samuel también es ayudante de Dios. [Arme la tienda y comience a barrer. Canten: “El niño Samuel” (Alabanzas infantiles, no 115), con la siguiente letra: El niño Samuel fue un ayudante, con la escoba él barrió, fue un ayudante.]?

Mira las lindas velas. El pequeño Samuel tiene una tarea que hacer. Pule el candelabro. El pequeño Samuel es ayudante del sacerdote Elí. [Señale a Elí.] Samuel también es ayudante de Dios. [Encienda una vela sobre la mesa, fuera del alcance. Deje que su niño(a) la apague. Aplauda y felicite al niño por su ayuda. Canten: “Seré un ayudante” (Alabanzas infantiles, no 115).]

Es de noche en el templo de Dios. [Haga dos camas en el suelo con colchas.] El sacerdote Elí duerme en su cama. [Acuéstese como si fuera Elí.] Samuel está bien abrigado en su cama. [Que su niño se acueste.] Samuel no está dormido. Está mirando las cortinas. [Canten: “El niño Samuel” (Alabanzas infantiles, no 115), con la siguiente letra: El niño Samuel fue un ayudante, es la hora de dormir, quietecito queda.] ¡Shhh! Elí está durmiendo. [Simule que está roncando.]

¡Sam-u-el! [Llame con voz dramática, luego susurre.] ¡Shhh! ¿Quién llama? [Pausa.]
—¡Samuel! [Fuerte otra vez.]
Debe ser Elí. Samuelito corre a ver a Elí.
—¡Aquí estoy! —dice—, ¿tú me llamaste?
—No —contestó el sacerdote Elí—. [Sacude la cabeza.] No te llamé, ve a acostarte.[Repita lo anterior dos veces poniendo un mayor énfasis en cada ocasión.]

¡Vuelve a tu cama, Samuelito! —le dice el sacerdote Elí—, Dios te está llamando. La próxima vez que escuches su voz, dile: “Habla, Señor, que tu siervo oye”.
Así que Samuel vuelve a su cama.[Que su niño simule dormir.]

—¡Sam-u-el! —vuelve a llamar Dios. Samuel se sienta y dice: [Espere que el niño se siente.]
—Habla, Señor, que tu siervo oye.
Y Dios susurra secretos al oído de su ayudante.[Abrace al niño mientras le susurra al oído: “Samuel era un pequeño ayudante de Dios. Y tú eres el mío”.]