Fe Real | Lección 7: Ayuno, pureza y sencillez | 4to Trimestre 2024 | Año A
Lección 7 de Fe Real
AYUNO, PUREZA Y SENCILLEZ
La mente y el corazón pueden desviarse con facilidad y aun así conservar la apariencia de que andamos por buen rumbo. En esta lección se exploran varias maneras de practicar y mostrar una dedicación completa al Señor.
LO QUE HACE FALTA
Esta es una ilustración y nada más. ¿Qué relación podría tener con las citas bíblicas de la siguiente página?En una escena de la película Vaqueros de ciudad, un veterano les enseña a tres aspirantes a vaqueros una lección sobre el significado de la vida. Durante la noche, después de arrear el ganado, estos tres tipos que nunca habían salido de la ciudad se sientan alrededor de una fogata junto a su tosco y antisocial guía. Ellos son muy conscientes de que la supervivencia del ganado y de ellos mismos depende de la experiencia, las habilidades y los esfuerzos del experimentado vaquero para enfrentar los impredecibles elementos del ambiente que los rodea.
El actor Billy Crystal, que interpreta a uno de los jóvenes de la ciudad, se dirige al viejo vaquero y le dice:
—Usted parece tener paz consigo mismo y estar confiado de que no existe nada que no pueda manejar. ¿Cómo puedo hacer yo para alcanzar ese mismo estado?
El viejo vaquero piensa por un minuto y le responde:
—Necesitas tener algo.
—¿A qué se refiere? —pregunta curioso Billy Crystal, señalando el dedo índice del vaquero, que apunta al aire.
—¡Ese es el secreto! —dice el vaquero mirando fijamente a Crystal a los ojos. Billy Crystal pregunta ahora más ansioso:
—¿Qué es lo que hace falta?
Con el dedo aún señalado al aire, el vaquero le responde:
—Eso lo decides tú. Pero si quieres tener un propósito en la vida y desarrollar confianza en tus capacidades, todos tenemos que perseguir un objetivo, algo, alguna cosa. Eso es lo que hace falta.
Nuestro trabajo es descubrir qué es ese «algo». Para el joven rico que se acercó a Jesús eran sus posesiones, o quizá la posición social que disfrutaba gracias a ellas. Si somos honestos con nosotros mismos, descubriremos que todos tenemos «algo» alrededor de lo cual se mueve nuestra vida y a lo que sentimos que no podemos renunciar.
La película nos presenta ese momento en el que descubrimos cuál es el propósito de la vida. Para el personaje interpretado por Billy Crystal, resultó ser el amor por su familia. Si tuviésemos que hurgar en nuestra vida hasta alcanzar lo más importante, ¿qué sería ese «algo»?
Texto clave
Escoge uno de los textos de la sección del miércoles. Escríbelo aquí y apréndelo de memoria para esta semana.
MI OPINIÓN
- A Kelly le encanta leer novelas, y a veces incluso pierde la noción del tiempo cuando se dedica a la lectura. Podría decirse que para ella las novelas son una vía de escape. Su mamá se dio cuenta de que cada vez pasaba más tiempo leyendo y le dijo: «Kelly, últimamente has estado leyendo demasiado. ¿Por qué no descansas un poco y haces algo diferente?».
- Kelly permaneció impasible y le respondió: «Quizá más tarde», sin darse cuenta del tiempo que le estaba dedicando a ese pasatiempo y el poco tiempo que le estaba dedicando a Dios. Para ella, los libros eran «más divertidos» que estar a solas con Dios o dedicada a la oración. En realidad, Kelly nunca había sido una persona muy espiritual, pero sentía el sincero deseo de tener una relación más cercana con Dios.
- Si ella se acercara a pedirnos consejo sobre cómo hacer para «mantener la perspectiva», ¿cómo podríamos animarla a dedicar su vida a «algo» que le resulte entretenido y al mismo tiempo la ayude a ser mejor?
- Visitemos www.guidemagazine.org/rtf [en inglés] y publiquemos nuestra respuesta. Seamos claros y sinceros. Digamos lo que pensamos.
¿QUÉ TRATA DE DECIRNOS?
Diferentes personas, diferentes opiniones. Algunos pensamientos que siguen representan los puntos de vista de sinceros ciudadanos del reino de Dios, pero otros no. ¿Puedes distinguir entre unos y otros? ¿En qué se comparan estos pensamientos con lo que Dios dice en su Palabra? Después de repasar los textos de la sección «Dios dice...», escribe un párrafo que exprese tu opinión. Preparémonos para exponer lo que hemos escrito en la Escuela Sabática.
- «Al hombre que trata de caminar dos caminos a la misma vez se le romperán los pantalones». Proverbio del África occidental.
- «El esquí extremo pareciera que fuera un deporte para alguien que desea morirse, pero hay a quienes les encanta el riesgo de atravesar la nieve a grandes velocidades en medio de un bosque de álamos o de abetos. ¡El secreto, por supuesto, es no chocar contra los árboles! En la revista Outside, el escritor y esquiador Tim Etchells presenta el desafío: “Sea cual sea el tipo de terreno, tener una vista aguda es vital. Hay que fijarse en los espacios entre los árboles, las salidas por donde se espera que pasemos”. “No hay que fijar la mirada en las cosas con las cuales no queremos estrellarnos”, dijo con naturalidad [el campeón mundial de esquí extremo] Kim Reichelm». Tim Krupski, pastor estadounidense contemporáneo.
- «Que el ayuno sea para el Señor, con nuestros ojos fijos en él. Que sea esta nuestra intención, y solamente esta: glorificar a nuestro Padre en el cielo». John Wesley, ministro británico del siglo XVIII.
- «Ningún caballo va a parte alguna si no se lo dirige. Ningún vapor o combustible nos llevará a ninguna parte a menos que lo confinemos a un motor. Ninguna catarata producirá luz y electricidad hasta que sea canalizada. Ninguna vida llegará a ser grande a menos que esté enfocada, dedicada y disciplinada». Harry Emerson Fosdick, ministro del siglo XX.
Escribe tu propio pensamiento
Yo digo que...
¿Y ENTONCES?
- Hay una tarjeta postal que muestra el examen final de un ejercicio de entrenamiento de perros. Unos cuarenta pastores alemanes están sentados junto a un camino, todos alineados. Frente a esta formación de valientes candidatos hay un gato blanco y negro que camina tranquilamente, aparentemente imperturbable ante la peligrosa situación que fácilmente podría acabar con su vida. Imaginemos tan solo la concentración, la disciplina y la determinación de esos caninos.
- Para ir al cielo no es necesario que ayunemos. Las personas que ayunan no ganan más puntos en su marcador espiritual o más joyas en su corona. La verdad es que el ayuno es para aquellas personas a las que les cuesta mantenerse concentradas, y que luchan desesperadamente por mantener a Dios en primer lugar en sus vidas. Hay quienes no pueden trabajar en medio del desorden, tienen que limpiar y ordenar su habitación o su oficina para poder trabajar de manera efectiva.
- Por medio del ayuno podemos poner en orden nuestra vida espiritual. Dediquemos un tiempo a «ayunar» de la televisión si vemos que esta interfiere en nuestro caminar con Dios. Alejémonos un día o dos de Internet si pasamos más tiempo chateando con nuestros amigos que conversando con nuestro Salvador. Dejemos de comer comidas rápidas o de hacer deporte durante unos días. Busquemos cuáles son las cosas que se interponen en el camino (por más que sean buenas) y abstengámonos de ellas mientras dedicamos toda nuestra atención a Cristo. El propósito principal del ayuno es tratar de que nuestro corazón encuentre ese «algo».
DIOS DICE...
- Mateo 6: 16-18
«Cuando ustedes ayunen, no pongan cara triste, como los hipócritas, que
aparentan tristeza para que la gente vea que están ayunando. Les aseguro que
con eso ya tienen su premio. Tú, cuando ayunes, lávate la cara y arréglate bien,
para que la gente no note que estás ayunando. Solamente lo notará tu Padre,
que está en lo oculto, y tu Padre que ve en lo oculto te dará tu recompensa». - Hebreos 3: 1
«Por lo tanto, hermanos, ustedes los del pueblo santo, que han sido llamados
por Dios a ser suyos, consideren atentamente a Cristo Jesús, el Apóstol y Sumo
Sacerdote, gracias al cual profesamos nuestra fe». - 1 Timoteo 4: 11, 12
«Estas cosas tienes que mandar y enseñar. Evita que te desprecien por ser
joven; más bien debes ser un ejemplo para los creyentes en tu modo de hablar
y de portarte, y en amor, fe y pureza de vida». - Santiago 1: 27
«La religión pura y sin mancha delante de Dios el Padre es esta: ayudar a los
huérfanos y a las viudas en sus aflicciones, y no mancharse con la maldad del
mundo». - Filipenses 4: 8, 9
«Por último, hermanos, piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno
de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo
que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que
merece alabanza. Sigan practicando lo que les enseñé y las instrucciones que
les di, lo que me oyeron decir y lo que me vieron hacer: háganlo así y el Dios
de paz estará con ustedes». - (Versículos adicionales: Hageo 1: 5, 6).
¿QUÉ TIENE QUE VER CONMIGO?
- Ese «algo» que movía a Jesús, ¿qué crees que era? Jesús siempre se dedicó a tratar de cambiar las percepciones que tenía la gente de Dios. Pero ese «algo» a veces significaba simplemente acabar con el dolor en la vida de otra persona. Había momentos en que Jesús se volcaba en enseñar, y de hecho siempre lo hacía. Otras veces Jesús se dedicaba a pasar tiempo a solas con su Padre.
- Pero de todas las cosas que había en el corazón de Cristo, la principal era asegurar nuestra salvación. Nada, absolutamente nada interfirió en su propósito de lograr que nosotros estuviésemos con él durante toda la eternidad. Max Lucado lo expresa bien cuando dice que a Dios se le hizo más fácil cargar con el peso de nuestros pecados que soportar la idea de estar sin nosotros toda la eternidad.
- ¿Tener determinación? ¿Estar concentrados en Cristo? ¡Haríamos bien en creerlo! Si Jesús tuviera que responder a la lección de esta semana, pondría nuestro nombre como ese «algo» por el cual él existe. No nos confundamos respecto del valor que tenemos para él. Mientras pensamos en ello, Jesús nos enseñará paso a paso lo que significa que nosotros hagamos de él ese «algo» en nuestras vidas.
¿CÓMO FUNCIONA?
- Pensemos en tres cosas de nuestra vida de las que podríamos «ayunar» esta semana. Asignémosle a cada una algo en lo que quisiéramos concentrarnos (nuestra vida de oración, el deseo de servir a otros, el estudio de la Biblia, la comunión en soledad, el dominio propio, etc.) y coloquémoslo en la línea bajo el número 1. Esto será lo que hace falta, ese «algo» que llegará a convertirse en nuestro objetivo durante ese período de tiempo. Alrededor del número 1 hay otras líneas. Allí anotaremos las cosas que interfieren o de las que sería conveniente abstenernos mientras nos enfocamos en ese «algo».
📖 | L1 | L2 | L3 | L4 | L5 | L6 |
L7 | L8 | L9 | L10 | L11 | L12 | L13 |
Dios les bendiga!!!
COMENTARIOS